El palacio en sí es muy impresionante, ya que incluye varios estilos de arquitectura en sus paredes y el contraste entre los colores pronunciados es muy llamativo. Los colores me recuerdan de la otra famosa obra de Leonardo de Figueroa en Sevilla, la Iglesia de San Salvador.
Los detalles intensos y realistas de la fachada principal son los más impresionantes para mí, ya que originalmente sirvió como la entrada principal al instituto para marineros y marineros. Todas las figuras en la escultura sobre la puerta son representativas de los estudios de los marineros y también representan a Atlantes, San Telmo y San Ferdinand. Me parece muy interesante porque no solo representa las cosas que aprenden los marineros, sino que también representa a los santos y dioses que los protegen cuando están navegando por mar y que protegen a la ciudad en que ellos viven.
Además, de Figueroa incluye esculturas de otras increíbles figuras sevillanas en el edificio para respetarlas. Hizo esculturas de personas como Juan Martínez Montañés, Velázquez y Murillo.
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