"La Inmaculada Concepción/La Colosal"

"La Inmaculada Concepción/La Colosal"

Una de las primeras visitas que hicimos en clase fue al Museo de Bellas Artes de Sevilla, hogar de una colección amplia de pinturas y esculturas desde la época medieval hasta los principios del siglo XX, ubicada en un antiguo convento. Aunque el museo contiene muchas maravillosas obras, una de mis favoritas es la Inmaculada Concepción, por el artista sevillano Bartolomé Esteban Murillo. También conocida como "La Colosal", fue pintado alrededor del año 1650 y es una de las muchas pinturas que hizo Murillo de María y la Inmaculada Concepción. (A lo largo de su carrera, Murillo pintó más o menos dos docenas de Inmaculadas Concepciones, posiblemente más que cualquier otro pintor español de su tiempo.)

Nacido en Sevilla en 1617, Murillo es más conocido por sus obras religiosas, aunque también produjo un gran número de pinturas de mujeres y niños de clase obrera. Estos retratos muy realistas de prostitutas, pilluelos y mendigos (dos de mis favoritos son "El joven mendigo" y "Las Gallegas/Mujeres en la ventana") son mis obras favoritas de Murillo, porque crean un registro extenso, informativo y convincente de la vida cotidiana de su época, similar en muchos aspectos a las modernas fotoperiodistas.

Mientras que "La Inmaculada Concepción" es claramente una obra religiosa, también me parece convincente y poderosa, aunque de una manera diferente. Con unas dimensiones de 436 x 297 cm (se llama "La Colosal" por sus grandes dimensiones), se centra en la pared al fondo del aula más espectacular del Museo, la capilla antigua, con un techo alto, arqueado y muy decorado. La escena es monumental, dinámica y llena de movimiento, como se puede ver en el paño que remolina, la túnica blanca, el manto azul, y el acompañamiento de los ángeles jugando alrededor de la imagen de la Virgen. El estilo característico de Murillo de ligereza y dulzura es obvio en los colores suaves y brillantes (específicamente el oro y el blanco, como si la Virgen fuera vestida de la luz del sol), y la pintura se siente fluida, accesible y acogedora.

Tal vez el símbolo más importante de la obra es la luna a los pies de María. Como ya comentamos en clase, la luna se utiliza a menudo para representar la pureza de María, y indica la conexión entre los 28 días de un ciclo lunar y el ciclo similar de la menstruación. Esta conexión de la luna y la pureza de María me fascina, especialmente al considerar las muchas formas complicadas, pero a menudo similares, que la luna ha sido representada a lo largo de la historia religiosa, no sólo dentro de Catolicismo sino otras religiones también. Un signo de la fertilidad, relacionado con la vida y la muerte, la luna es un símbolo popular en muchas religiones. Debido a la conexión entre la Virgen, la luna, y la representación de la pureza, había una gran controversia cuando Galileo descubrió que la Luna tiene cráteres. También, en las Américas, cuando mucha gente nativa era forzada a convertirse al catolicismo, muchas personas le utilizaban a María como un sustituto para su diosa de la luna original. Para mí, el hecho de que las caras de la luna cambian con los días hace su conexión muy clara con los cambios de estaciones, el crecimiento y el decaimiento, el flujo y reflujo. Por esta razón, no me sorprende que muchas referencias bíblicas utilizan el símbolo de la luna para resaltar acontecimientos cósmicos, epifanías divinas y el carácter efímero de la vida humana y la historia. Aunque no soy una persona particularmente religiosa, la conexión de las fases de la luna y las partes de la vida (lunas crecientes y el crecimiento de una persona, el menguante de la luna y el envejecimiento, la luna llena y el nacimiento) tiene sentido, y el símbolo sirve para hacer la pintura más accesible para el público, religioso o no. Para mí, esto es la cualidad más fuerte de obras religiosas de Murillo, su capacidad de invitar y contar historias a audiencias diversas con la luz, dulzura, accesibilidad y belleza, y  usar símbolos como la luna, además de la técnica artística (como el movimiento y el dinamismo) para hacer sus pinturas profundas y convincentes.

-Rose Kendrick