El niño espulgándose, (Murillo) y

Lazarillo de Torres 

Lazarillo de Tormes es un figura mítica y puro español. Según el libro anónimo escrito en el siglo XVI, Lazarillo de Tormes, el personaje de Lazarillo es un niño pobre que vive en el calle. A través de su vida miserable, Lazarillo sufre de la hambre, la pobreza, y la vergüenza. Sin embargo, el actitud del Lazarillo siempre lleva un sentido de la esperanza y el optimismo en contra de su mala suerte. Lazarillo es un mito porque a pesar de todo lo que él sufre, en el fin del libro Lazarillo gana el éxito y el amor. 

Lazarillo de Tormes es una obra famosa por sus implicaciones sociales en el siglo XVI de España. 

Siendo una edad muy religiosa, la España del siglo XVI fue dominada por la influencia de la Iglesia Católica. Por eso, la obra es una revelación satírica de esa vida religiosa  por el punto de vista de un personaje de la clase baja (Lazarillo). Según la Iglesia del siglo XVI, Lazarillo deber ser una persona sin valores. Sin embargo, aunque Lazarillo ha sido engañado por la iglesia, el gobierno, y su esposa, todavía él lleva un sentido del malo y del bueno.  

Arriba se ve la obra, El niño espulgándose, hecho por Murillo en el año 1645. Muchas veces se ve esa obra de un niño espulgándose vinculada con el libro, Lazarillo de Tormes. Con mucho claroscuro, la obra muestra un niño joven sentado en el suelo. Además, la obra es un bodegón; hay un vaso y algunas manzanas en el primer plano. El niño es sucio y delgado, y llevando ropa de la calle; parece que él tuvo que pelear por la poca comida que lleva ahora. Por su puesto, esta representación de Murillo tiene mucho que ver con la figura literaria llamado, Lazarillo de Torres. Ambos son niños sucios, pobres, pero los dos llevan una voluntad para sobrevivir.