He visitado el hospicio de la Santa Caridad dos veces. La primera vez
fui con mi clase de la sesión intensiva. Lo que mas me impresiono
fueron las dos pinturas al entrar. Pensé que era muy interesante que
se trataban de la muerte, y que ponían énfasis en la idea que todos
morimos iguales. Siento que es una idea muy fuerte y que se debe tomar
en cuenta porque es fácil de olvidar. También fue muy interesante ver
las pinturas de Murillo. Sus pinturas religiosas fueron un contraste
con las pinturas al entrar. Se me hizo fascinante que las pinturas
fueran colocadas de una forma que pintaran una historia. Cuando fui la
primera vez, la clase puso mas enfoque en las obras barrocas. Se que
las pinturas de Murillo son muy barrocas, pero nos enfocamos mas en la
retabla y en todos los detalles. La explicación que nos dio nuestro
profesor anterior fue menos enfocado en el arte y el significado.
Hablamos mucho sobre lo que ocurría socialmente y el tono hacia el rey
que construyo el hospicio fue muy diferente del el tono de la clase
mas reciente. Fue muy interesante ver los dos profesores hablar de el
mismo lugar y la misma era de tan diferente manera. Siento que me
ayudo ver la época barroca de diferentes maneras.



-Julissa Salcedo