Centro Andaluz de Arte Contemporáneo

Uno de mis días favoritos en Sevilla fue cuando visité el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo. El museo está en un monasterio antigua. Está cerca de la casa de mi señora y no necesité andar mucho. También el museo tiene horas cada día cuando no cuesta nada para entrar. Fue a las 7 y vi la puesta del sol. Puedo recordar los colores y la sensación de tranquilidad.


Si todavía viviera en Sevilla, visitaría muchas veces para relajarme y andar por el campo del monasterio. No hay mucho arte: cuando fui, solo había una galería temporal. Creo que el máximo es tres galerías. No había mucho arte permanente.

Para mí, me gustó el edificio más que el arte, pero me gustó mucho una obra de arte en particular. Había una cara y brazo en las ventanas del edificio. Interrumpió la vista bonita en una manera muy graciosa.





En particular, me encantaron las entradas. Los arcos son muy bonitos, con millones de detalles. Es claro que el lugar es muy viejo y podía sentir su historia con las entradas y las decoraciones.

Puedo recordar una puerta muy interesante. Tiene muchos estampados - casi demasiados. Cada es muy diferente y es mucho trabajo para los ojos ver todo. Alrededor de la puerta, hay un dibujo que me parece como columnas romanas. No podía entrar o ver la sala de está puerta. Estoy muy
  curiosa saber que está detrás de la madera.