Alejandro de CIEE dio un tour por el
monasterio de la cartuja y los alrededores. Todavía hay unos monjes que viven
allá, pero es una vida muy ascético y en nuestra edad moderna, la gente en
general tiene menos ganas de vivir en un monasterio. En el pasado, era muy
común que muchas familias ricas enviaron uno de sus hijos al monasterio. Yo
pregunté si ellos hacen magdalenas o cerveza como algunas monjas de Sevilla y
los monjes belgas, pero ellos no necesitan cocinar nada porque tienen el apoyo
de la comunidad religiosa. Muy cerca del monasterio hay una antigua fábrica de
cerámica. Afuera hay una selección de muchos tipos de azulejos que hicieron en
el pasado. Cuando funcionaba la fábrica, muchas familias en Sevilla compraron
unos azulejos especiales para decorar su hogar. Ahora la fábrica está cerrada,
pero todavía puede ver las chimeneas de ladrillos. Son muy altas. Ahora parte
del monasterio se ha convertido en el Centro Andaluz del Arte Contemporánea.
Muchas de las obras que estaban en el monasterio ahora están en el Museo de
Bellas Artes de Sevilla. También tuvimos la oportunidad para ver el sepulcro de
Don Pedro Enríquez y de Doña Catalina de Ribera, que vimos en clase. Los pies
las mujeres en las esculturas fueron cortados porque viendo que los monjes no pudieron
salir del monasterio, los lideres religiosos pensaban que iban a ser
tentaciones sexuales. Pienso que es una pena que unas esculturas hermosas han
sido rotados por una idea tan ridículo.
- Clara Ocneanu
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